Cuándo llevar a un bebé al dentista

Los primeros meses en la vida de un niño son momentos de primeras veces. La primera visita al dentista es algo muy importante que los padres deberían tener en cuenta. La higiene dental es otro punto a tener en cuenta, puesto que es preciso cuidarla incluso antes de desarrollar su primera dentición. Ahora bien, ¿cuándo es el momento de traer a tu hijo a Dentaland por primera vez?

La primera visita, ¿cuándo y cómo?

Las asociaciones de odontopediatría a nivel internacional recomiendan que la primera visita al dentista se produzca antes de que cumpla el primer año de vida. De esta manera, es más sencillo prevenir y resolver ciertas patologías o problemas relacionados con la salud bucodental.

Otro momento para esa primera visita es a la salida de las piezas dentales. Antes se pensaba que era bueno esperar a completar la dentición, pero en los últimos años estamos viendo niños menores de 4 años con caries, por lo que es preciso ser cautos y prevenir. Por eso ha cambiado la edad recomendada.
Por otra parte, se ha descubierto que existe una relación entre el desarrollo facial y la aparición de la dentadura en los más pequeños, siendo clave observar cualquier irregularidad para actuar cuanto antes. El objeto de estas primeras visitas es prevenir no solo la aparición de caries sino también posibles complicaciones futuras relacionadas con su salud dental.

En qué consiste esa primera cita 

Como expertos en odontopediatría para los más pequeños, en Dentaland tratamos de hacer estas visitas lo más amenas posible. Su objetivo es el de revisar los dientes de leche y encías, y además comprobamos si existe algún problema en el crecimiento de los dientes o en la mordida.

Es importante que los niños acudan a esta toma de contacto acompañados de sus padres. Además de la revisión, abriremos su historial e incluiremos los antecedentes médicos y también los problemas bucales de la familia. Por otra parte, explicaremos a la familia las pautas para perfeccionar la higiene dental. Es decir, os explicamos a todos la manera correcta de cepillarse los dientes.

Por otro lado, también te ofrecemos unas directrices a seguir en los hábitos alimenticios de los más pequeños. Las dudas más habituales que nos presentan las familias son las relacionadas con la retirada de chupete y biberón para evitar que se deforme la dentadura.

Por último, hablamos con los padres para que ellos también extremen el cuidado de su propia higiene dental. Sin ser conscientes, los adultos podemos transmitir bacterias a los niños (por ejemplo, al comprobar con los labios si la comida está caliente). Por esa razón es fundamental que los padres tengan una buena higiene bucodental, pues sus caries favorecerán la aparición de caries en el bebé.

Nervios y miedo

Por norma general, los niños se angustian ante la primera visita al dentista. El equipo de Dentaland está formado para tratar con eso y evitar que se convierta en una pesadilla. 

Una de las claves está en establecer un vínculo más cercano con el odontopediatra y no causarle malestar con experiencias propias que infunden temor. Los padres podéis hablar del dentista de manera positiva, y traerlos a una edad temprana evita ese miedo al dentista, ya que así percibirán las visitas como una normalidad. 

¿Cuándo debería volver?

Tras la primera toma de contacto, y si no hay nada a lo que haya que prestar más atención, se programa la siguiente visita en los 6 o 12 meses posteriores.

Solo nos queda recordarte que la primera visita al dentista es una de esas primeras veces importantes. Si empiezan a asomar los primeros dientes en la boca de tu hijo o hija, no dudes en pedir cita en Dentaland y convertiremos esa cita en algo divertido.