¿Qué es la anquilosis dental?

Vamos a detenernos en un trastorno poco común, conocido como anquilosis dental. Este es el nombre que recibe la fusión del diente con el hueso, lo que evita la erupción y el movimiento ortodóntico. Esto se da porque desaparece el ligamento periodontal, dando lugar a una unión ósea y provocando que la raíz del diente se fusione con el hueso. La anquilosis dental puede afectar tanto a los dientes primarios como a los permanentes, ya puede ocurrir en cualquier momento durante la erupción, pero que afecta sobre todo a los niños que aún tienen dientes de leche. 

¿Qué es la anquilosis dental?

La anquilosis es el proceso de unión de dos huesos en uno solo. En odontología, nos referimos a la fusión de los dientes con el hueso de la mandíbula. Como ya sabemos, los dientes deberían estar siempre separados del hueso de la mandíbula y sujetos a ella por los diferentes tejidos y ligamentos que hay entre ambos. Sin embargo, por razones que aún se desconocen, algunos niños pierden estos tejidos y sus dientes terminan por unirse a la mandíbula. Si un diente queda fusionado con el hueso maxilar quedará totalmente rígido e impedirá la salida del diente definitivo.

Aunque puede aparecer también en los definitivos, es un trastorno más común en los dientes de leche. Los molares son los que mayor índice de afección presentan, registrando prácticamente la mitad de los casos.

¿Cómo afecta a la boca de los niños la anquilosis dental?

Supone un problema muy serio para el correcto desarrollo de la boca de los más pequeños. Y es que, cuando un diente queda fusionado con la mandíbula y por tanto sujeto a esta, hace prácticamente imposible que el diente definitivo pueda salir de forma correcta, por más presión que este ejerza sobre el primario. Por lo general, el diente definitivo acabará por brotar a un nivel inferior del resto de los dientes adyacentes, provocando lo que conocemos como mordida abierta (cuando se mastica no existe contacto entre el diente superior e inferior).

Además, esta anomalía provoca que los dientes próximos al afectado modifiquen su posición ya que no tienen contacto proximal con este, desviándose hacia el hueco que ha dejado libre la pieza dañada. 

Este es otro de los motivos por los que en Dentaland recomendamos que los niños acudan al odontopediatra cuanto antes. De esta manera, se puede valorar y atajar esta anomalía, en caso de presentarse, evitando males mayores en el futuro.

Los síntomas de la anquilosis dental

Hay dos hechos que nos van a permitir valorar a simple vista si el niño presenta este trastorno:

• Que un diente sobresalga de la encía menos que los demás.
• Que se hayan mudado todos los dientes de leche menos una pieza, y esta no presente signo de movilidad alguno. 

Tipos de anquilosis dental

Como en la mayoría de las afecciones de la boca, existen diversos tipos de anquilosis dental, que se distinguen por su gravedad:

• Leve. Es imposible de detectar a simple vista ya que la diferencia entre el plano oclusal de las piezas adyacentes es de tan solo dos milímetros y apenas causa molestias. Suele ser detectada por los especialistas mientras están realizando chequeos rutinarios a sus pacientes.
• Moderada. La pieza afectada presenta un ligero contacto con los dientes contiguos. En esta fase resulta imprescindible acudir cuanto antes al odontólogo para que solucione el problema, antes de que este impida la erupción del diente definitivo.
• Severa. Es la más fácil de identificar ya que el diente no habrá salido al exterior o bien, no tiene contacto ninguno con los dientes de al lado. Cuando la pieza dental no ha salido al exterior, solo se puede observar mediante las radiografías ya que se encuentra sumergida en la encía.

Posibles causas de la anquilosis

Aunque se desconoce por qué se da la anquilosis dental exactamente, sí que hay unas circunstancias que se relacionan con su aparición:

• Golpes o fracturas severas en una pieza dental.
• Antecedentes familiares.
• Falta de movilidad en el diente.

Y también, tiene consecuencias:

• Los dientes contiguos al afectado se van inclinando por la presión que ejerce este sobre ellos.
• Desviación de la sonrisa hacia el diente que esta afectado.

Tratamientos

Cada caso es único, por eso en Dentaland te aconsejamos que acudas a la cita con el odontopediatra de manera regular o, si ves algún signo de alarma, solicites una con nosotros para poder valorar la gravedad del trastorno.

En muchas ocasiones, se deja que el diente siga su curso hasta que se produzca el recambio. Pero si la pieza anquilosada interfiere en el proceso eruptivo, y pueda dar lugar a  repercusiones negativas en la oclusión dental del paciente, el odontólogo pautará un tratamiento combinado de cirugía y ortodoncia. Este consiste en la extracción del diente afectado, para después colocar en el hueco resultante de la extracción un mantenedor de espacio, con el que sé asegura la salida del diente definitivo.